El cine asiático sigue conquistando el cine esta vez con ‘Los rostros del diablo’ clasificada dentro del género de terror, en la que el maquillaje y la imagen tienen la intención de generar un gran impacto en los espectadores.

Para nadie es un secreto que el mundo oriental está lleno de leyendas y mitos de horror, que a lo largo del tiempo han tratado de mantenerse vivos consolidando su significado. De ahí, que esas tradiciones sean protagonistas en las producciones cinematográficas de esta parte del planeta exhibiendo un estilo particular cuya esencia se pone de manifiesto en propuestas como El aro (la versión original de 1998) y Audition (1999).

Con ‘Los rostros del diablo’ se aborda desde un lado distinto la temática de los exorcismos tan recurrente en la industria cinematográfica. El filme cuenta una macabra historia de terror, que relata la vida de la familia Kang-Gu, que cambia de vivienda y que en el nuevo inmueble es acechada por un demonio.

Este ente malévolo tratará de adueñarse de los integrantes de este círculo familiar, quienes recurren a un sacerdote, también de la familia, para que los ayude a exorcizar la criatura que quiere robarles las almas.

 

La familia Kang-Gu está conformada por los padres Gang-Goo (Dong-il) y Myung-Joo (Young-nam), y los tres hijos, Sun-Woo (Hye-Jun), Hyun-Joo (Yi-Hyun) y Woo-Jong (Kim Kang-Hoon) y cuando se mudan a su nueva casa, cosas extrañas y terribles les empiezan a sucederles.

La cinta  del director Hong-seon Kim se destaca por su excelente fotografía y las actuaciones sobresalientes de Seong-woo Bae, Dong-il Sung, Young-nam Jang, Hye-Jun Kim, Yi-Hyun Cho, Kang-Hoon Kim, quienes logran causar terror. De igual manera, tiene un trabajo de cámara y montaje laureado que replica la claustrofobia de los personajes al estar en una pequeña casa cuyo habitante es un demonio.

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